El colectivo Bordadoras por la Paz ha documentado más de mil casos entre desapariciones, asesinatos, feminicidios y crímenes de odio. Alertan sobre el aumento de las cifras.
- Fuentes Rojas, del Distrito Federal, fue la inspiración para construir el colectivo Bordadoras por la Paz, quienes cada domingo en el Parque Revolución plasman en un pañuelo blanco las historias de los sin justicia.
- Tere Sordo Vilchis fue quien contactó a Fuentes Rojas en el Iteso para luego integrar el colectivo Bordadoras por la Paz junto con Margarita Sierra. Actualmente está formado por ocho activistas.
- El motor que impulsó a Margarita Sierra y Tere Sordo a emprender la lucha por la paz por medio de aros, agujas e hilos de colores han sido las historias de dolor.
- Dos casos emblemáticos fueron la punta de lanza para iniciar el movimiento. Guadalupe Aguilar y Natividad Guerrero desde el 2010 sufren un viacrucis por encontrar a sus hijos desaparecidos.
- Elena, Patterson, Margarita, Tere Yademira y Hasel junto con dos compañeras representan el Colectivo Bordadoras por la Paz en Jalisco.
- Cada domingo se acercan a Bordadoras por la Paz personas en busca de consuelo al sacar del anonimato oficial la historia de su ser querido.
- Las víctimas de la violencia fueron convertidas en cifras oficiales, pero sus nombres quedan bordados en pañuelos que traspasan las fronteras de un país en guerra.
- Figuras en relieve con hilos de colores pintan las historias de cientos de hombres, mujeres y niños que mueren a diario o son víctimas de la violencia y que aún claman justicia.
- Desde marzo del 2012 Colectivo Bordadoras por la Paz ha documentado mil casos entre homicidios, feminicidios, crímenes de odio y ejecuciones perpetrados en Jalisco.
- Bordadoras por la Paz empezaron contando la historia de los migrantes en su desafortunado camino a Estados Unidos. Las bordadoras dejaron de lado la indiferencia para contar la historia de los caídos.
- Para Margarita Sierra lo ideal es que dejen de bordar en memoria de los caídos, pero –alerta- lamentablemente están aumentando las desapariciones y asesinatos en Jalisco.
- A un año y medio de bordar en el Parque Revolución, en el colectivo se sigue hablando de la indiferencia de las autoridades. Retumban las frases como: “El callar no implica que no haya problemas”.
- En tanto la autoridad no da avisos de avances en las investigaciones, pañuelos al viento claman justicia y un ya basta a la indiferencia de las autoridades.
- Cada pañuelo cuenta una historia y en ellos se hila la memoria, por medio de puntadas que duelen, de víctimas que se empeñan a no perder la identidad.
- Imelda Virgen el 29 de septiembre del 2012 fue asesinada por su esposo. Se considera que es el primer feminicidio en Jalisco, aún no reconocido por las autoridades.
- A ocho meses de la entrada al gobierno de Enrique Peña Nieto, las víctimas siguen en espera de la búsqueda de desaparecidos.
- El clima de violencia que se vive en México también ha propiciado las desapariciones de niños y niñas. Sus padres siguen esperando su regreso.
- Aunque el bordado se considera un oficio femenino, hombres se han unido a Bordadoras por la Paz.
- La sangrienta lucha en México ha sobrepasado las fronteras internacionales y los bordados por la paz surgen como voces de solidaridad para unirse a la exigencia de justicia.
- Desde México hasta Japón, Chile, Argentina, Brasil, Italia, Estados Unidos, Inglaterra bordan para preservar la memoria de los muertos en territorio mexicano.